Desde que era niña, María Julia siempre tuvo un espíritu emprendedor. Cuando estaba en el colegio, empezó a vender dulces en los recreos; ya de grande, aprendió a cocinar y comenzó a vender anticuchos en la casa de su madre. Sin duda, sus ganas de seguir adelante y construir un mejor futuro, no la detuvo nunca.
Cuando llegó a Lima, se desempeñó como trabajadora del hogar y cuidadora de niños por varios años. Pero no fue hasta que inició su propio servicio de planchado industrial, cuando María Julia ingresó al mundo del emprendedurismo.
“Ingresé a un taller de costura y empecé a planchar, así logré, poco a poco, formalizar mi propio negocio. Esto me permitió tener muchos clientes y comenzar a trabajar con empresas.”, comenta la emprendedora.
El negocio marchaba bien; sin embargo, María Julia pronto se dio cuenta que la apicultura era una oportunidad de emprendimiento más rentable y sostenible, tanto para ella, como para su comunidad, en el distrito de El Tallán, en Piura.
“Mi familia cosechaba miel y yo la vendía en mi servicio de planchado. Vi que las ganancias de la miel eran mayores y empecé a invertir mis ahorros en la compra de las colmenas. Dejé el planchado cuando vi que los costos del local subían y ya no era rentable continuar desempeñando esa actividad. ”, menciona.
En ese momento, María julia regresó a Piura, vendió su negocio, y comenzó a dedicarse a las abejas y colmenas.
Del planchado industrial a la apicultura
María Julia decide formar la “Asociación de Apicultores ADONAI – TABANCO”, junto a vendedores independientes que buscaban ofrecer sus productos a través de una marca reconocida y así conseguir una mejor presentación.
Rápidamente, la apicultora demostró su capacidad de liderazgo y fue nombrada presidenta. A raíz de ese logro, se le presentó la oportunidad de participar en el proyecto ‘Mujeres en la Empresa’de CARE Perú, financiado por la Fundación H&M.
‘Mujeres en la empresa’ empodera a mujeres de localidades en las regiones de Piura y Junín, para que desarrollen negocios viables, competitivos e innovadores.
Hasta la fecha, el proyecto de empoderamiento económico ha impactado a más de 800 mujeres y formalizado más de 40 asociaciones. De la misma manera, ayudó a la asociación de María Julia en el proceso de formalización, organización y en la distribución y venta de sus productos a través del comercio electrónico.
“A penas entramos al proyecto, ya vendíamos con etiqueta: el desarrollo de la marca colectiva ha sido una propuesta innovadora del proyecto que nos ha permitido crecer, distinguirnos y resaltar frente a la competencia.”, comenta la apicultora.
La asociación de María Julia creció rápidamente, la formación obtenida la llevó a desarrollarse no solo en lo profesional, sino también en lo personal, ya que fueron capacitadas en temas de ahorro e inversión.
Innovación tecnológica en el emprendimiento
Un aspecto importante para el crecimiento del negocio de María Julia ha sido el uso de la tecnología. A través de la aplicación ‘LISTA’ de Fundación Capital, las mujeres de la asociación fueron capacitadas de forma digital en habilidades y prácticas financieras.
Esta innovadora aplicación les ha permitido desarrollar conocimientos, actitudes y habilidades para mejorar sus capacidades financieras, así como promover su alfabetización digital. Las mujeres aprendieron a utilizar las tablets para realizar su educación financiera. Incluso, en las capacitaciones participaron sus hijos, nietos, tías y esposos.
“Antes yo no sabía usar un cajero automático, ahora, gracias a estas capacitaciones puedo hacerlo, e incluso, tengo habilidades para hacer un presupuesto. Las capacitaciones virtuales fueron muy exitosas, logramos aprender muchísimo.”, señala.
Para la emprendedora, también se han presentado muchos desafíos, pero ha sabido sobreponerse. Hace unos meses, antes de la pandemia, María Julia había sido víctima de robo, le arrebataron casi todas sus colmenas. Sin embargo, eso no la detuvo, al contrario, le dio más fuerzas para continuar con su formación.
“Agradezco a CARE Perú, porque gracias a las capacitaciones del proyecto “Mujeres en la Empresa”, tengo las herramientas como mujer emprendedora, para salir adelante y seguir luchando.”, comenta.
María Julia reconoce que las mujeres emprendedoras enfrentan más dificultades para acceder a financiamiento y otras formas de inclusión financiera, debido a la desigualdad de género que aún persistente en nuestra sociedad.
“Debemos empoderarnos, saber que somos capaces de hacer lo que nos apasiona, hacerlo con amor, y seguir luchando por nuestros sueños. Es importante mirarnos en un espejo y sentirnos que valemos mucho más que una piedra preciosa”, sostiene.
Finalmente, la emprendedora aconseja a otras mujeres a que sean perseverantes y sepan valorarse así mismas, solo así podrán cumplir todas las metas que se propongan.
Los invitamos a conocer más sobre el conversatorio “Mujeres Emprendedoras” aquí: