La pandemia por la COVID-19 está afectando a millones de niñas, niños y adolescentes en etapa escolar alrededor del mundo, en temas relacionados a educación, salud, seguridad y alimentación, dejando, esto último, consecuencias negativas en su nutrición.
Con motivo de la emergencia nacional y el aislamiento social, este año las clases escolares en el Perú se están dando, por primera vez, de forma remota a través de Internet, televisión y radio, con el programa “Aprendo en Casa”. Como consecuencia, muchos menores han dejado de recibir desayunos y almuerzos escolares que eran esenciales para su desarrollo.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) señala que suspender los programas de comedores escolares por la pandemia pone en peligro la seguridad alimentaria y la nutrición de las niñas y niños vulnerables. Además, debilita su capacidad para afrontar enfermedades, aumentando el riesgo de enfermar.
En ese sentido, el secretario general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que, en el mundo, unos 310 millones de escolares (casi la mitad del total mundial) dependen de la escuela para tener una fuente sistemática de nutrición diaria. La falta de acceso a estos alimentos afecta el desarrollo integral de los menores y agrava las tasas preexistentes de malnutrición y anemia.
La falta de ingresos también afecta su alimentación
Otro de los problemas que afecta la nutrición de los escolares está relacionado con la reducción de ingresos debido a la pandemia. Ahora que pasan más horas en casa, las familias tienen que invertir más en su alimentación diaria; sin embargo, la emergencia ha recortado la cantidad de dinero que ganan. Según la OMS, esto provoca que reduzcan la inversión en salud y alimentación, lo cual afecta especialmente a las niñas, niños, mujeres embarazadas y madres lactantes.
Una encuesta de INEI hecha a familias de Lima Metropolitana y Callao durante la primera semana de mayo indica que un 14% de hogares no pudo comprar alimentos con alto contenido en proteínas como las carnes y el pescado. Uno de los principales motivos fue la falta de dinero (73%).
Como respuesta a esta necesidad, el servicio alimentario del Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma está entregando alimentos no perecibles, así como proteínas de origen animal y leche evaporada entera a las familias de los estudiantes, con el fin de atender a alrededor de 3 millones de estudiantes de más de 58 000 instituciones educativas públicas de todo el país. Si bien esta ayuda es esencial, el trabajo también recae sobre las madres y padres, quienes tienen ahora más responsabilidad en la alimentación de sus hijas e hijos.
¿Cómo lograr una buena alimentación en casa?
Paul Lucich, jefe de nutrición de CARE Perú, recuerda a los padres y madres que la lonchera constituye aproximadamente el 15% del aporte calórico diario. Para que las niñas, niños y adolescentes no pierdan este aporte alimentario ahora que están en casa, recomienda lo siguiente:
- Definir un horario a media mañana y a media tarde para un refrigerio saludable, que incluya lo que idealmente una lonchera debería contener: un sándwich, una fruta y una bebida saludable como un jugo o agua de frutas o agua pura.
- Se deben evitar los alimentos ultra procesados y golosinas.
- En casa siempre existe la posibilidad de “estar picando” alimentos durante todo el día. Esto debe evitarse para evitar el consumo de alimentos no nutritivos o para evitar que “se llenen” y no consuman adecuadamente los alimentos principales: desayuno, almuerzo, cena.
- Animarlos a aumentar el consumo de agua pura.
El hecho de que las niñas, niños y adolescentes pasen ahora más tiempo en casa puede ser aprovechado para inculcarles hábitos de alimentación saludable. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan, adicionalmente:
- Enseñarles a comer frutas, verduras y productos integrales.
- Incluir leche y productos lácteos bajos en grasa o descremados.
- Ingerir proteínas a través de alimentos como las carnes, aves, pescado, lentejas y frijoles.
- Servir porciones de tamaño razonable.
- Animarlos a tener actividad física haciendo ejercicios en casa.
Sobre todo, se deben incluir alimentos ricos en hierro en la comida diaria como la sangrecita, el bazo, el hígado, el pescado de carne oscura y las carnes rojas, con el fin de prevenir la anemia. Recordemos que una dieta balanceada y saludable debe ser variada e incluir alimentos de origen animal ricos en proteínas, carbohidratos, grasas y azúcares saludables.
En CARE Perú, sumamos esfuerzos para garantizar y fomentar la alimentación saludable de niñas, niños y mujeres. Por esta razón, con el apoyo de Coca Cola, hemos creado el Kit CARE, un producto que trabaja las áreas de nutrición y reactivación económica de los pequeños negocios.
El KitCARE consiste en proveer a las familias peruanas de información nutricional, recetas para el día a día y de una canasta de alimentos no perecibles, motivándolas a realizar sus compras en bodegas cercanas. Con este proyecto, contribuimos con la seguridad alimentaria de más de 800 hogares de las regiones de Arequipa, Junín, Lima y Piura; y promovemos el crecimiento de los emprendedores afectados por la coyuntura de la COVID-19.