16 días de activismo contra la violencia de género

HOSTIGAMIENTO EN LAS EMPRESAS

El Hostigamiento Sexual Laboral (HSL) es una de las formas de violencia de género más comunes que enfrentan las mujeres. Si bien afecta tanto a hombres como mujeres, es preciso señalar que este problema impacta en mayor medida a las mujeres, producto de una serie de ideas y estereotipos sociales y culturales que promueven, justifican y perpetúan la violencia contra ellas.

Según OIT, tanto hombres como mujeres son objeto de acoso sexual, si bien los estudios ponen de relieve que la mayoría son mujeres. La investigación muestra que el tipo de mujer más vulnerable al acoso sexual es la mujer joven, económicamente dependiente, soltera o divorciada y con estatus de inmigrante. Con respecto a los hombres, aquellos que sufren un mayor acoso son los jóvenes, homosexuales y miembros de minorías étnicas o raciales. (OIT, Hoja informativa género, salud y seguridad en el trabajo).

Existen tres diferentes tipos de manifestaciones del hostigamiento sexual laboral, estos son: acoso de género, atención sexual no deseada y coerción sexual. Las manifestaciones pueden ser desde bromas, comentarios, comportamientos sexistas, hasta condicionar el trabajo a cambio de favores sexuales. Conoce más sobre los tipos de manifestaciones, y sus ejemplos, en la siguiente infografía.

A pesar de ser un problema bastante extendido, y que no hay industria o institución que sea inmune a él, las tasas de denuncias y registros suelen ser bajas, pues existe una cultura que desalienta la denuncia de los casos de hostigamiento. Otras razones de las bajas tasas de denuncias son el desconocimiento sobre los mecanismos de atención, la poca eficacia de estos, e incluso, el hecho de que muchas formas de hostigamiento sexual laboral han sido naturalizadas al punto de no identificarlas como manifestaciones de violencia.

Para entender mejor el panorama, de acuerdo a un estudio elaborado por Genderlab (2019), solo el 6% de mujeres responden afirmativamente el haber estado expuestas a situaciones de acoso sexual en el trabajo (frente al 1% de hombres). Sin embargo, cuando se les pregunta por manifestaciones concretas, el resultado es cinco veces mayor: 30% de las mujeres reportan que están expuestas a chistes y burlas con contenido sexual, 17% indican que han recibido miradas morbosas e insinuantes y el 5% reportan que han sufrido tocamientos no deseados.

Uno de los mayores predictores del acoso sexual es lo permisiva que es una organización con este tipo de comportamiento. La tolerancia es determinada por el liderazgo, en ese sentido, cuando los líderes se toman este problema en serio, cuando investigan rápidamente las quejas y cuando se aseguran de que el perpetrador enfrente consecuencias, se reduce considerablemente. Esto tiene que ver con el poder y con las personas que acceden a él en las estructuras empresariales. Por eso, los esfuerzo se tienen que centrar en cambiar las estructuras con mayor participación de las mujeres y en puestos de liderazgo.

La participación de las mujeres en altos cargos no se resume solo a reducir el hostigamiento, sino que, además, contribuye significativamente a mejorar las tasas de rentabilidad. Cada vez, hay más evidencias de que la coexistencia de mujeres y hombres en el mismo entorno hace que los equipos sean más creativos e innovadores, que gocen de niveles más altos de crecimiento y de un mejor desempeño (Banco Mundial, 2016), que logran captar mayor talento profesional y logren incrementar su productividad (ONU Mujeres, 2016).

Finalmente, el hostigamiendo sexual laboral es un problema que acarrea costos económicos para toda la sociedad en su conjunto, incluyendo a las empresas. Un estudio elaborado por Deloitte Access Economics (2019) identifica que los costos transcienden a las víctimas, afectando profundamente la productividad por las altas tasas de ausentismo y clima laboral de las empresas.

Categorías

Sin categorías.

Únete a nuestra lucha.
Suscríbete a nuestro boletín.

Todos los datos están protegidos por la Política de privacidad de CARE Perú. Lea los Términos y condiciones aquí.